Al menos 14 personas murieron este viernes por el derrumbe de un tejado exterior en una estación de tren en la ciudad Novi Sad, en el norte de Serbia, país ubicado en la región valcanica de Europa.
Entre los fallecidos se encuentra un niño de aproximadamente 7 u 8 años.
Bomberos y equipo de emergencia llegaron al lugar, además de máquinas excavadoras aportando escombros.
Los equipos de emergencia seguían buscando a supervivientes por la tarde.
El gobierno serbio declaró este sábado día de luto oficial, según un comunicado publicado por la radiotelevisión estatal del país.
“Este es un viernes negro para nosotros, para toda Serbia, para Novi Sad”, declaró el primer ministro serbio, Milos Vucevic
El instituto de transfusión de sangre de la ciudad hizo un llamado a los residentes para que donaran sangre tras el accidente.